domingo, 30 de junio de 2024

Wayland... el gran desafio de la comunidad Linux.

KDE vs. GNOME. Systemd o no Systemd. Entornos gráficos vs. gestores de ventanas tiling. Arch vs. Ubuntu. Flatpack vs. Snap...

 Dentro del mundo de GNU/Linux hay un montón de «guerras» internas. Nada que haga llegar la sangre al río, pero sí que los fervientes defensores de una u otra opción se decanten por su preferencia en detrimento de la otra. Y todo el mundo cargado de argumentos.

En este caso, os voy a hablar sobre Wayland. Veremos qué es exactamente eso de Wayland, X11 y porque adoptar una u otra tecnología en nuestra distribución GNU/Linux.

Este artículo es una traducción/adaptación del artículo en inglés publicado por Nate Graham para su blog, que puedes leer aquí:

En él nos habla de lo que motivó este nuevo proyecto, de qué quería solucionar y de porque lleva tantos años queriéndose aplicar. Lo hace desde el punto de vista de un colaborador de KDE. Empecemos…

 ¿Que es Wayland?.

Wayland es un conjunto de protocolos que rigen cómo un compositor gráfico de un sistema operativo dibuja cosas en la pantalla (ventanas, botones, etc) y cómo las aplicaciones interactúan con la infraestructura de dibujo en la pantalla del compositor.

Es similar a los protocolos HTTP y SMTP que rigen cómo los navegadores web y los clientes de correo electrónico envían y reciben páginas web y datos.

Wayland también incluye una implementación de esos protocolos en un conjunto de bibliotecas extremadamente livianas llamadas libwayland-client y libwayland-server que ofrecen API estables y versionadas. Aplicaciones y compositores como KWin de KDE y Mutter de GNOME utilizan esas API para hacer cosas. 

jueves, 20 de junio de 2024

La primera bicicleta de la historia.

Se podria decir que llevo casi toda la vida andando en bici, aunque si que es cierto, que hubo un parentesis de ciertos años sin tocarla.

Mis dos bicis actuales, las fui montando poco a poco con mis propias manitas, pieza a pieza, y por lo que se ve no lo hice tan mal, ya que la mas antigua, va para los treinta años que la tengo y no he hecho nada mas que cambiarle zapatas de freno y arreglarle pinchazos...

Como os decia, como usuario ocasional de este fenomenal artilugio, creo que es de recibo hondanar un poco en la historia para saber de donde y como surgio este fabuloso invento, que tantas pasiones y quejas levanta por doquier. Al lio...

 

La primera bicicleta de la historia, como puedes suponer, no era como las actuales. De hecho llamarla bicicleta es un tanto arriesgado, pero la realidad es que tenía dos ruedas, un asiento y un manillar que permitía cambiar la dirección hacia la que se dirigía la rueda delantera. Eso sí, carecía de cadena ni pedales. Debías impulsarte con los pies.

Es decir, se parecía más a las bicis actuales de los niños pequeños, esas con las que empiezan a aprender a montar, que a las actuales bicicletas llenas de detalles y estudios aerodinámicos.

Ahora nos puede parecer una obviedad, pero en la época fue un invento la mar de novedoso. Imaginemos una sociedad acostumbrada a caminar o, como mucho, moverse a caballo o en carruaje.