El archivo Franzen.

 En los últimos años, muchas cosas buenas están pasando para preservar la historia de la fotografía española. Han tenido que pasar 50 años para que todo el archivo de Christian Franzen sea digitalizado y compartido en las redes. Si nos interesa descubrir la obra de un fotógrafo único del siglo XIX y principios del XX, no dudes en buscar entre estas 37.000 fotografías.

Fábrica de bolsos Loewe.

 Jamás se puede ser un buen fotógrafo si no conoces la obra de los artistas del pasado. Christian Franzen fue muy valorado por la nobleza y la alta burguesía del cambio de siglo que le tocó vivir. Gracias a su trabajo podemos entender cómo era aquella sociedad de la que somos herederos.

También se relacionaba con el mundo de la cultura. Una de sus amistades más notables fue la que mantuvo con Joaquín Sorolla, lo que nos permite descubrir todo lo que hicieron juntos.

Lo más valioso es que a partir de hoy podemos encontrar en internet, accesible para todo el mundo, documentos únicos para entender la sociedad de fin de siglo y descubrir cómo era la técnica fotográfica en aquellos primeros tiempos.

 El archivo Frazen de Radio Televisión Española (RTVE).

El 14 de noviembre de 1971 apareció un anuncio por palabras en el periódico ABC. Por algún motivo que no alcanzó a entender, RTVE decidió comprar todo ese archivo. Tiene 36.852 negativos de gelatinobromuro con formatos y soportes variados. Además, hay 5020 positivos de negativos; y solo 122 de esos positivos no se conservan en negativo.

Cuando se compró el archivo se guardó en Somosaguas (Madrid). Luego se llevó a un depósito en Arganda del Rey y a finales de los años 90 llegó a las oficinas de los estudios de Prado del Rey en Pozuelo de Alarcón.

 En aquellos años se empezó a digitalizar el archivo, pero solo se llegó a 10.000 archivos. Años más tarde se decidió, por fin, cambiar las cajas originales que contenían todos los negativos por una de PH neutro. Al menos sirvió para darse cuenta del estado en el que estaba el valioso archivo.

En 2015 decidieron retomar en serio la digitalización de absolutamente todas las fotografías. Y hoy, por fin, todo aquel que cuente con acceso a internet podrá disfrutar de un trabajo único.

 El estudio de este fotógrafo llegó a ser uno de los más importantes de Madrid, a la altura del de Kaulak, Antonio Cánovas del Castillo y Valle, sobrino del famoso político.

Entre sus proezas técnicas destacaban los retoques que hacían directamente en el negativo con la ayuda de las tintas chinas y por supuesto el uso del flash de magnesio en interiores para alumbrar todo lo que sucedía. Es el flash que tanto usaban en las películas mudas para asustar a los espectadores.

Pero sobre todo destacaba por sus relaciones con la nobleza y por tener el título de fotógrafo de la Familia Real desde el 7 de julio de 1899. Como os podéis imaginar, esto fue lo que le hizo subir en el candelero de los fotógrafos de entonces.

 Así que si queréis disfrutar de un fotógrafo incansable, descubrir cómo éramos y tener una de las mejores fuentes de inspiración de aquellos años, os recomiendo que reservéis un poco de vuestro tiempo para encontrar una mirada única de un fotógrafo que dejó todo en Copenhague para terminar en Madrid.

Aquí os dejo el enlace, al archivo de RTVE. COLECCION CHRISTIAN FRANZEN