Están las tradiciones en tierra firme y luego las que se suceden cada año en el cielo, convirtiéndose en verdaderos rituales de observación astronómica. Uno de ellos son las conocidas como Lágrimas de San Lorenzo, una lluvia de meteoros que se sucede cada agosto y que queda espectacularmente plasmada en el timelapse de las Perseidas hecho con siete horas de fotografías que os mostraré a continuación.
Conseguir una creación así no es ni mucho menos algo rápido, pero tampoco exige una dificultad o unos dispositivos profesionales al uso. Su creador, decidió coger su equipo y capturar este fenómeno astronómico y plasmarlo de esta manera, con ese efecto de viaje en el tiempo que siempre logran transmitir los timelapses.
Una larga sesión fotográfica resumida en menos de un minuto.
Una de las claves del vídeo es la perspectiva y el encuadre, ya que no se centró en enfocar sólo la zona del cielo donde se observaron los meteoros. El encuadre abarca el horizonte incluyendo también superficie terrestre, de modo que juega con los halos de las luces de ciudades, coches y demás elementos. De hecho, es casi más protagonista la Vía Láctea que las Perseidas, la cuales podemos observar a modo de chispas o pequeños flashes cada pocos segundos. Son un total de 47 segundos que simulan un poco nuestra perspectiva si intentásemos ver el cielo en modo panorámico (y pulsando el botón de acelerar el tiempo, claro). El vídeo son en realidad siete horas de capturas compactadas en algo menos de un minuto. El punto desde donde se hicieron las fotografías fue Torreperogil, un pequeño pueblo en Jaén (España), aunque se alejó a más de 10 kilómetros del núcleo urbano para que la contaminación lumínica no fuese un problema (como aconsejamos nosotros cada vez que hablamos de disfrutar de alguno de estos fenómenos). Para la captura Daniel usó su Sony Alpha A9, con un objetivo Samyang de 14 milímetros y f/2.8, recurriendo a una rótula monitorizada Syrp Genie para timelapse.
Siete horas de sesión y tres días de trabajo.
Una sesión fotográfica o de vídeo suele ocupar varias horas (según también de qué se trate y qué se quiera conseguir), pero luego falta añadir el trabajo de edición que habitualmente es necesario para al menos dar el toque personal del editor (además de corregir los valores que puedan haber salido desajustados). Y aunque las siete horas que componen la totalidad de material para componer este vídeo no son pocas, lo que duró fue el trabajo de edición del vídeo. Este en concreto, lo forma un total de 1.512 imágenes en formato RAW, ocupando casi unos 73 GB. Para la edición se usaron dos programas: por un lado LRTimelapse, para que el color de las fotos fuese progresivo, y por otro Adobe Lightroom para editarlas. Tras esto, se exportaron las fotografías y se convirtieron a vídeo, fotograma a fotograma.
El autor.
El autor de dicha odisea es Daniel Doncel, un joven fotógrafo de 19 años aficionado a la astrografía, del cual podeis conocer algo mas atraves de su web. A continuación, os dejo el resultado, una autentica belleza visual.
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