25 aniversario del Live at Wembley '86 de Queen.

Parece que fue ayer, pensarán los melancólicos, pero hoy se cumplen 25 años de uno de los acontecimientos musicales más recordados de la historia. Lo protagonizó Queen, y se trata de su mítico concierto Live at Wembley. O mejor dicho, de sus conciertos en Wembley, ya que la banda repitió dos noches sobre las tablas del estadio deportivo, y ante la imposibilidad de hacerlo por tercera vez, trasladaron su macroescenario a Knebworth Park, en la que fue la última actuación de la banda antes de la muerte de Freddie Mercury. Nadie imaginaba que aquella gira, ‘A kind of magic’, iba a ser la despedida de los escenarios para Queen. Los posteriores intentos de resucitación, encabezados por el guitarrista Bryan May, son apenas una nota a pie de página en la historia del grupo a ojos de los fans.

Esos días de julio sonaron en el templo del fútbol inglés todos los grandes éxitos de Queen, desde ‘Bohemian Raphsody’ hasta 'I Want to Break Free’, desde ‘Radio Gaga’ hasta ‘We are the Champions’. Pero además de la música, los asistentes recuerdan a un hiperactivo Freddie Mercury, disfrazado de reina de Inglaterra, como símbolo de una época. Queen, y en particular Freddie Mercury, se habían convertido en uno de los iconos británicos más reconocibles de las décadas de los 70 y los 80. La biografía de Mercury, un parsi nacido en Tanzania, criado en la India y triunfador en Londres, reconciliaba a los ‘british’, sobre todo a los más progresistas, con la parte buena, si la hubo, de su pasado imperial y colonial (aunque una actuación de Queen en la Sudáfrica del apartheid disparó las críticas contra el grupo). La muerte de Mercury a los 45 años, víctima de una bronconeumonía agravada por el sida, solo sirvió para agrandar aún mas la leyenda.


Cinco millones de copias
Como escribió Tim Teeman, periodista del Times londinense, el 12 de julio de 1986 fue “el día en el que el mundo cantó”. 'Queen: Live at Wembley 86', el doble disco recopilatorio de aquel concierto, ha vendido desde su publicación más de cinco millones de copias. Un cuarto de siglo después, los posters de la actuación se siguen vendiendo como churros en todas las tiendas de música y las casi 250.000 personas que asistieron a alguna de las dos sesiones no dejan de estremecerse al recordar a Mercury en estado de gracia.

¡Larga vida a la Reina!

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